Te he pensado con intensidad y sin mucho orgullo, aunque con un poco de deslealtad, debo reconocerlo, ¿Ya no existe la monogamia, no?, ¿Dónde has estado y por qué tan lejos de mi boca seca?
Sabes que soy una persona de incertezas y por eso extrañaba la certidumbre de saber que nos esperábamos los fines de semana y de que un encuentro nos mezclaría sin presunción alguna. Tú, como yo, odias la vanidad y te burlas de los vanidosos.
No sé si te acuerdas de mí y tras un par de años en los que pensé en ti, seguramente tres veces por semana, has venido a verme con tu sombrerito azul. ¿Quién estuvo causando tu ausencia lejana además de mí y mis dudosas decisiones?
Detén mis inseguridades.
Estás cerca y te veo venir con la forma perfecta de tu panza.
El primer beso me llena las entrañas medio atoradas de otras amantes que no se parecen a ti. No has cambiado, aunque ahora hay en ti una leve sensación de fiebre que no me incomoda pero tampoco me refresca.
Me miras mientras te miro y no nos importa que haya gente alrededor, no participamos de su banal conversación. Hot wather o Aqcua calda dicen y sonríen. Suponen tu nombre en otras lenguas lejanas que no nos pertenecen ni a ti ni a mí.
Estás un poco agresiva. Tus besos saben igual pero tus golpe son más intensos. ¿Qué has hecho en este tiempo?
3, 5, 7 besos y me carcomes. No te importa, no parece importarte.
Vas y vienes y no puedo seguir el ritmo de tus designios. No puedo más.
Agresividad
Nauseas que producen lástima.
¿Y si nos volvimos incompatibles? No puede ser, yo te amo y tú me amas, te esperé y me esperaste.
A lo mejor esta no es nuestra noche, pero ya vendrá otra, para ti y para mí, llegará otro reencuentro, esta noche me voy, pero tú no, centro de la fiesta, quédate e irradia la alegría de tu panza.
Hasta la próxima, aguardiente, siempre serás mi bebida.
Jacobo Jurado
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